El debate por el casamiento homosexual ha generado (y lo seguirá haciendo) efervescentes opiniones y discusiones varias sobre el efecto del mismo en la conformación de una familia, y particularmente en lo que respecta a su influencia sobre los hijos de dicha pareja...
Quizás debamos simplemente asumir que el tenor de las buenas y malas influencias es igualmente equilibrado, en el mejor de los casos, tanto en una unión heterosexual como en aquella en la cual dos homosexuales (que se aman) se casen...
Y adicionalmente, que nada nos confiere a ninguno de nosotros, el poder de influir sobre la crianza de dichos niños…
miércoles, 21 de abril de 2010
Equilibrios y no tanto
Publicado por Juans en 8:51
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2 han dicho algo:
Me parece perfecto que una pareja homosexual pueda concretar una unión civil. Deberían haberlo permitido hace mucho tiempo. Creo que es sólo la aceptación social y legal de algo que se vive a diario.
Sin embargo para el tema de la adopción no estoy tan de acuerdo. Todavía tengo algunos prejuicios aunque no soy quién para juzgar quienes pueden dar mejor crianza.
De acuerdo a lo que veo, los padres modernos dejan bastante que desear...
Fabiana: Precisamente a tu última opinión me refería...
Hay diferencia entre lo que los padres "modernos" hacen en materia de crianza con lo que aún siquiera sabemos podrían hacer los padres gay?...
Gracias por pasarte
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